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Foto del escritorNutriólogo Jorge Euan

Evita la gripe cetogénica y los desequilibrios de los electrolitos con este remedio

Actualizado: 2 sept 2022

Sobre La gripe ketop




Muchos cuando realizan la dieta keto de inicio o durante la fase de inducción de una dieta cetogénica nutricional, o incluso una dieta Paleo baja en hidratos de carbono , algunas personas pueden experimentar síntomas como "gripe" (cansado, letargo, dificultad para respirar, incluso arritmia) que a menudo hacen creer que lo que están haciendo no es adecuado para su cuerpo.


Esta "gripe" es una manifestación de la dependencia mental y física de los carbohidratos, ya que el cuerpo esencialmente está pasando por una fase en la que tiene que aprender (o mejor dicho, volver a aprender) a usar las grasas como combustible.


Los síntomas más comunes de esta dolencia son:


  • 1. Cansancio y letargo

  • 2. Falta de concentración

  • 3. Calambres musculares

  • 4. palpitaciones cardíacas

  • 5. Deposiciones más lentas o reducidas

  • 6. Retención de agua / hinchazón (sí, muy pocos desequilibrios de sodio o electrolitos también causan retención de agua) Cansancio y letargo



La mayoría de las personas que hacen una dieta cetogénica o paleo, inicialmente terminan cortando muchos alimentos procesados. Y cuando uno corta los alimentos procesados, también se reduce mucha ingesta de sodio. Contrariamente a lo que nos han hecho creer, el sodio no es exactamente malo para nosotros, y en realidad necesitamos complementarlo, como hacen la mayoría de los animales de forma natural.


Cuando uno reduce los carbohidratos, no experimenta aumentos de azúcar en la sangre cada vez que come y digiere los alimentos, porque bueno, apenas come azúcar (todos los carbohidratos terminan como azúcares en el cuerpo). Como resultado, el cuerpo no necesita elevar los niveles de insulina circulante para mantener el azúcar en sangre en niveles normales.


En condiciones "normales", los riñones tienden a almacenar y reutilizar mucho sodio.

Cuando sus niveles de insulina son muy bajos y estables, los riñones, a través de varios mecanismos hormonales, entran en un modo de tipo diurético, excretando mucho sodio, potasio y agua. El efecto neto es, SI UNO NO REEMPLAZA EL SODIO, experimentar presión arterial baja. Los síntomas de la presión arterial baja incluyen mareos, debilidad y fatiga.

Otro aspecto de esta gripe cetogénica puede incluir las náuseas y la diarrea que a veces experimentan muchas personas nuevas personas que hacen dieta cetogénicas.

Cuando uno come, todos los nutrientes de los alimentos se descomponen en sus partes constituyentes, como los carbohidratos (glucosa), las proteínas (aminoácidos), las grasas (ácidos grasos) y la fibra.


Cuando se consumen grasas, varias enzimas pancreáticas y sales biliares del hígado y la vesícula biliar funcionan para descomponer las grasas/lípidos en colesterol, triglicéridos y otros componentes. El hígado, la vesícula biliar y el páncreas tardan tiempo en regular la producción de bilis/enzimas para acomodar una mayor cantidad de grasa que puede ser típica al cambiar a una dieta similar a Keto.


Si uno ingiere una gran cantidad de grasa y el hígado y el páncreas no producen o tienen suficientes reservas de bilis para descomponer la grasa, puede tener náuseas por esta grasa no digerida.


Otra cosa que puede pasar con las nuevas dietas cetogénicas es la diarrea. Hay un mundo diverso de bacterias, levaduras y otros microorganismos que forman parte del sistema digestivo humano. A veces, son beneficiosos y ayudan a digerir los alimentos, y a veces simplemente se aprovechan de una comida gratis. Todos los organismos del intestino compiten constantemente por el espacio y los nutrientes.


La persona promedio ha tomado rondas de antibióticos o ha consumido una dieta estadounidense estándar con muchos carbohidratos procesados y alcohol, y por lo tanto, probablemente ha estropeado el equilibrio de la microflora natural, dejando que E.coli, H. Pylori y Candida A. comienzan a hacerse cargo donde no deberían.


Esto sellama disbiosis intestinal es parte de la razón por la que un enfoque de alimentos integrales bajos en carbohidratos puede ser tan beneficioso para los trastornos autoinmunes.

Ahora sabemos que el 70 % de nuestro sistema inmunitario se encuentra en nuestro ecosistema intestinal, y estas bacterias intestinales tienen conexiones con nuestro sistema nervioso que pueden iniciar antojos como si nos dijeran que las alimentáramos con ciertos alimentos.[ 2]

Cuando uno deja de comer o reduce sustancialmente la ingesta de carbohidratos, muchos microorganismos dependientes del azúcar mueren de hambre. Los cadáveres de estos microorganismos pueden liberar productos químicos e iniciar la inflamación dentro del intestino, dejando a una persona con unos días de diarrea y náuseas al comienzo de la experiencia baja en carbohidratos.


La gripe cetogénica se puede tratar reponiendo electrolitos: sodio, potasio y magnesio.

Los síntomas similares a los de la gripe deben disiparse en unos pocos días o semanas, pero aún así se recomienda tener cuidado de obtener suficiente sodio, potasio y magnesio (también conocidos como electrolitos) en la dieta, especialmente si uno comienza a experimentar fatiga, espasmos musculares, dolores de cabeza, calambres musculares y, en casos graves, arritmia.


Los calambres en las piernas pueden ser la señal más común de que los electrolitos están desequilibrados.


Incluso si uno hace todo lo posible para ingerir sal de mesa y alimentos que contengan potasio y magnesio, puede encontrar la necesidad de suplementos. La ingesta diaria mínima para los tres electrolitos, como sugiere Lyle McDonald, es:


• 5000 mg de sodio (no solo sal)

• 1000 mg de potasio, en forma de cloruro de potasio o sulfato de potasio

• 300 mg de magnesio, preferiblemente en forma de citrato de magnesio, aspartato o glicinato


Todos estos electrolitos deben consumirse preferiblemente además de lo que obtienes de tu comida; por lo tanto, la cantidad TOTAL de electrolitos por día diría:


• 5000 - 7000 mg de sodio (no solo sal)

• 3.500 - 4700 mg de potasio

• 350 - 500 mg de magnesio




La mayoría de las personas no alcanzarán las cantidades sugeridas solo con alimentos y es posible que tengan que complementar, así que aquí hay algunas buenas maneras de alcanzar sus necesidades de electrolitos:


  • Sodio: sal marina, sal coloreada, caldo o caldo, jugo de encurtido


  • Potasio: espinacas crudas, aguacate, champiñones, salmón, filete, lomo de cerdo, cloruro de sodi


  • Magnesio: espinacas crudas, aguacate, aspartato de magnesio, lactato de magnesio, treonato de magnesio, citrato de magnesio


Movimientos intestinales más lentos o reducidos


Al comenzar una dieta baja en carbohidratos / cero carbohidratos / cetogénica, la mayoría de las personas experimentarán menos deposiciones y esto puede hacerles pensar que algo está mal. En realidad, las personas que reducen drásticamente la ingestión de carbohidratos procesados informan de una digestión y evacuación intestinal perfectas una vez que termina la adaptación (esto podría ser de entre 15 y 90 días).



La reducción de menos y más pequeñas deposiciones se debe a que los alimentos a base de carne y proteínas van a ser absorbidos a una tasa cercana al +90% por su sistema digestivo, frente a los productos vegetales debido a la fibra y otros compuestos indigestibles.

Además, ser bajo en sodio puede causar estreñimiento: al revisar la ingesta de sodio y asegurarse de ingerir 5-7 g de sodio a diario, la mayoría de los problemas parecen estar resueltos.

Al igual que con muchas otras cosas en Nutrición, no hay una postura definitiva sobre la importancia de la fibra, ya que algunas de las hipótesis (a veces basadas en estudios observacionales) no se han replicado en ensayos clínicos.

Artículos más interesantes sobre el consumo de fibra:


Abstracto

OBJETIVO: Investigar el efecto de la reducción de la fibra dietética en pacientes con estreñimiento idiopático.

MÉTODOS: Sesenta y tres casos de estreñimiento idiopático que se presentaron entre mayo de 2008 y mayo de 2010 se inscribieron en el estudio después de que la colonoscopia excluyera una causa orgánica del estreñimiento. Se excluyeron los pacientes con cirugía previa de colon o una causa médica de su estreñimiento. A todos los pacientes se les dio una explicación sobre el papel de la fibra en el tracto gastrointestinal. Luego se les pidió que hicieran una dieta sin fibra durante 2 semanas. A partir de entonces, se les pidió que redujeran la cantidad de ingesta de fibra dietética a un nivel que consideraran aceptable. La ingesta de fibra dietética, los síntomas de estreñimiento, la dificultad para evacuar las heces, el sangrado anal, la hinchazón abdominal o el dolor abdominal se registraron a los 1 y 6 meses.

RESULTADOS: La edad media de los pacientes (16 hombres, 47 mujeres) fue de 47 años (rango, 20-80 años). A los 6 meses, 41 pacientes permanecieron en una dieta sin fibra, 16 en una dieta reducida en fibra y 6 reanudaron su dieta alta en fibra por razones religiosas o personales. Los pacientes que dejaron de comer o redujeron la fibra dietética tuvieron una mejoría significativa en sus síntomas, mientras que aquellos que continuaron con una dieta alta en fibra no tuvieron ningún cambio. De aquellos que detuvieron la fibra por completo, la frecuencia intestinal aumentó de un movimiento en 3,75 d (± 1,59 d) a un movimiento en 1,0 d (± 0,0 d) (P < 0,001); aquellos con una ingesta de fibra reducida tuvieron un aumento de la frecuencia intestinal de una media de un movimiento por 4,19 d (± 2,09 d) a un Para la falta de fibra, la reducción de fibra y los grupos de alta fibra, respectivamente, los síntomas de hinchazón estuvieron presentes en el 0 %, el 31,3 % y el 100 % (P < 0,001) y el esfuerzo por pasar las heces se produjo en el 0 %, el 43,8 % y el 100 % (P < 0,001).

CONCLUSIÓN: El estreñimiento idiopático y sus síntomas asociados se pueden reducir de manera efectiva al detener o incluso reducir la ingesta de fibra dietética. **

"La naturaleza diurética (deshidratante) de la cetosis causa una excreción de tres de los electrolitos primarios del cuerpo: sodio, potasio y magnesio (31,40). Estos tres minerales están involucrados en muchos procesos en el cuerpo, uno de los cuales es la regulación de la contracción muscular, incluido el corazón. Algunos estudios muestran una pérdida neta de calcio, mientras que otros no. (31).

Y después de unas tres semanas, sus músculos se adaptan al uso de grasa principalmente sobre glucosa/quetones, lo que permite que sus reservas de glucógeno vuelvan a subir. Como se describió anteriormente, los músculos derivarán hasta el 50 % de sus necesidades energéticas de las cetonas durante los primeros días de cetosis. Sin embargo, esto disminuye rápidamente y para la tercera semana de cetosis, los músculos obtienen menos solo el 4-6% de su energía de los cuerpos cetónicos. (22)".

"Se tarda un tiempo en adaptarse completamente a la cetona. Al principio, el cuerpo está fabricando las cetonas, pero los tejidos aún no se han convertido completamente para usarlas con energía. A continuación, el cuerpo desperdicia las cetonas no utilizadas (que son altamente calóricas) en la respiración y la orina. A medida que pasa el tiempo y el cuerpo se adapta a la cetona, saca toda la energía que puede de las cetonas, para que no tengas una pérdida tan grande como lo haces desde el principio".




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